viernes, 17 de agosto de 2012

25 Comentarios Súper Pertinentes



Conseguí este artículo por ahí (en realidad fue un re-tweet de Neil Gaiman, con quien algún día me beberé un té conversando del clima, mark my words) y me gustó tanto que acá lo traduzco, subrayando aquellas observaciones que he aprendido en mi corta experiencia -y que seguro, si escribes, también has visto por ahí.


El autor es Chuck Wendig, redactor también de Double Dead, Mockingbird y Blackbirds, todas novelas. En general, escribe burda. El artículo original está aquí.


 
This guy.


25 COSAS QUE QUIERO DECIRLE A LOS LLAMADOS "ASPIRANTES" A ESCRITOR


 1-. YA BASTA DE "ASPIRANTE", TARADOS

Aquí están los dos estados en los que tú puedes existir: "persona que escribe" o "persona que no". Si tú escribes: eres un escritor. Si no escribes: no eres escritor. "Aspirar" es un estatus insignificante que romantiza el No-Escribir. Es tan ridículo como decir "aspiro a recoger ese pedazo de papel que está en el suelo". O lo recoges o no. No quiero oír de cómo tu pañal está lleno; quítatelo o deja de hablar de ello.

2-. PATEA A TU DENOMINADOR COMÚN MÁS BAJO EN LOS RIÑONES

 Puedes aspirar a ser muchas cosas en el reino de la escritura y eso está bien. Puedes aspirar a ser un autor publicado. O uno de bestsellers. O un independiente profesional. O un autor que plagia su autobiografía y Oprah le da con un palo por la cabeza en televisión nacional. Lo que debes hacer es aspirar a ser mejor escritor. Todos debemos. Nadie ha alcanzado su punto máximo. Todos podemos trepar más alto.

3-. "ASPIRANTES" A ESCRITORES, TAN LEJOS COMO PUEDES VER

 Nadie respeta a los escritores, pero todo el mundo quiere ser uno (quizá porque todo el mundo quiere ser uno). El punto es, ¿quieres ser escritor? Bien por ti. Igual que ese tipo. Y esa chica. Y él. Y ella. Y ese viejo. Y aquella zorra joven. Y tu vecino. Y tu cartero. Y ese chihuahua. Y esa fotocopiadora. Frente a ti hay un oceano de wannabes esclavos de la tinta y contadores de palabras. No digo esto para desanimarte. O quitarte importancia. Pero tienes que diferenciarte de los demás y eso lo consigues haciendo en vez de pretendiendo. Subirás más alto que ellos en una escalera hecha con las palabras que escribiste.

4-. TODOS LLENAMOS DE TRAMPAS LA JUNGLA QUE DEJAMOS ATRÁS

No existe "la forma" de volverse escritor profesional. No puedes caminar perfectamente el viaje de otro. Es por eso que los consejos sobre escribir son sólo eso: consejos. Una mera sugerencia. Puede que funcione. Puede que no. Hay muchas buenas ideas allá afuera, pero ninguna es un evangelio. Una persona te dirá que esta es la vía. Otro señalará el camino opuesto y dirá que esa es la vía. Ambos tienen razón para sí mismos y ambos están probablemente errados para ti. Todos nos hacemos nuestro propio itinerario y quemamos el mapa después. Es como es. Si quieres hallar la vía adelante, deja de buscar mapas y camina.

5-. LA PERFECTA SENDA DORADA DEL BODHISATTVA ESCRIBANO

El punto es, fuck la Forma Verdadera de Hacer las Cosas. Nadie tiene las respuestas -lo que tienes es sugerencias. El que te diga que tiene todas las respuesta está hinchado con mentiras. Desconfía de esa certeza y juega el papel del escéptico.

6-. SÍ, SIEMPRE SE SIENTE ASÍ

Siempre habrá días en los que te sentirás como un amateur. Donde se siente que todo el mundo es mejor que tú. Tienes esta negativa sospecha de que alguien se dará cuenta, te acusará por tus mentiras, se dará cuenta de que eres el equivalente literario de un indigente pintado en la pared con un pedazo de poop calcificado. Tendrás días en los que pararte frente a la página en blanco será como estar perdido en un torbellino. A veces odiarás lo que escribiste hoy, o ayer, o hace diez años. Los malos días son parte del paquete. Lo que tienes que hacer es ignorarlos, envolverte la cabeza en papel aluminio y seguir escribiendo.

7-. DESCUBRE CÓMO ESCRIBES , LUEGO HAZLO

Aprendes temprano a escribir. Pero a la mayoría de los autores les toma mucho tiempo aprender cómo ellos en particular escriben. Ciertos procesos, estilos, personajes, géneros, puntos de vista, tiempos, lo que sea -se te darán con más naturaleza a ti que a otros. Y algunos no se te darán para nada. Quizá te des cuenta de esto tan pronto comiences. Pero para la mayoría, toma tiempo -tiempo invertido en escribir- para reconocerlo.

8-. TERMINA TU VAINA

 Voy a teclear esto una docena de veces para que quede claro: termina tu vaina. Termina tu vaina. Termina tu vaina. Termina tu vaina. Termina tu vaina. ¡Termina tu vaina! TERMINA TU VAINA. Termina. Tu. Vaina. Teeeeerminaaaaa tuuuuuu vainaaaaaaa. FINISH YOUR SHIT. Vervollständigen Sie Ihre Fäkalien! Termina tu vaina.
9-. DEBES CONOCER LAS REGLAS...

 ...Para saber cuándo romperlas.

10-. DEBES ROMPER LAS REGLAS...

...Para saber por qué importan.

11-. A LO QUE ME REFIERO CON "REGLAS" ES-

 Escribir es una habilidad técnica. Una disciplina. Puedes alegar que la narrativa es un arte. Puedes alegar que el arte emerge de la buena escritura como un delfín montado en unos esquís acuáticos emerge de la imágen abstracta después de que tienes mucho rato mirando. Pero no te desesperes, jefe. Todavía tienes que aprender cómo comunicarte. Tienes que aprender las leyes de esta enloquecedora tierra. He visto a demasiados autores queriendo dar el salto por encima de la habilidad y empezar a contar historias -¿alguna vez trataste de adelantarte a tu nivel de destreza? Yo solía ver imágenes en mi cabeza y trataba de pintarlas en acuarelas y terminaban viéndose como si alguien vomitó yogurt aguado sobre el lienzo. Yo me quejaría: ¿POR QUÉ NO SE VE HERMOSO? Uhhh, porque no sabes cómo pintar, estúpido. No puedes explotar tu talento hasta que tengas la habilidad para impulsarlo.

12-. ¡OH, LOS DÍAS DE ENSALADA DE UNIVERSIDAD!

  ¿Por qué los días de nuestra juventud se conocen como "días de ensalada? ¿Es "ensalada" realmente la imagen que conjura los salvajes y fructíferos tiempos de nuestra adolescencia? "Fritos" quizá. O "barril de cerveza". No sé. ¿De qué estábamos hablando? ¡Ah! Sí. La universidad. ¿La necesitas? ¿Necesitas educación colegiada, Joven Aspirante de la Orden del Monobolígrafo? Necesitar, no. Para ser publicado, a nadie le importa medio pepino si tienes un título o no. Sólo les importa que puedas escribir. Ahora, la universidad e incluso un post-grado pueden ayudarte a volverte un mejor escritor -¡me ayudó a mí!- no obstante, es de debatir si el dinero que echaste en ese pozo se pudo invertir mejor en mantenerte alimentado mientras aprendías a escribir en la madriguera que llames "domicilio". Sólo puedes aprender hasta un punto de alguien que te enseña a escribir. Eventualmente, sólo tendrás que escribir.

13-. LEER NO TE HACE UN ESCRITOR

Ese es el viejo consejo, ¿no? "Todo lo que necesitas es leer y escribir para ser escritor". No aprendes a escribir por la lectura más que un carpintero aprende carpintería por sentarse en una silla. Aprendes a escribir escribiendo. Y cuando leas algo, aprendes al diseccionarlo -¿Qué está haciendo el autor? ¿Cómo están trazados los personajes y la trama? Debes leer críticamente -esa es la llave.

14-. AQUÍ ESTÁ TU LATICA, TU CARRITO DE MERCADO Y TU ROPA SUCIA

 Vas a pasar hambre por un tiempo, vete acostumbrando ahora. No renuncies a tu otro empleo. Todavía.

15-. EL COMERCIO NO ES EL ENEMIGO DEL ARTE 

Si crees que el comercio de algún modo devalúa al arte, esta conversación ha terminado. No tengo nada para ti. El dinero no devalúa al arte más de lo que el arte devalúa al dinero; el comercio puede ayudar al arte, herir al arte o no tener algún efecto. El dicho no es "el dinero es la raíz de todos los males". Es "El amor al dinero es la raíz de todos los males". El comercio perjudica al arte cuando el único objeto del arte es el dinero. Así es con tu escritura.

16-. NO SERÁ UN ÉXITO DE LA NOCHE A LA MAÑANA

 De repente en la pantalla de tu radar aparece una masa brillante de xenomorfos acercándose rápido a tu posición y es casi que "¡Hey! ¡Este autor salió de la nada! ¡Éxito de la noche a la mañana! ¡Mega-bestseller! ¡Contrato multimillonario!" Y luego se te mete en la cabeza: "Yo puedo hacer eso. Puedo ir de un relativo donadie al Autor Favorito de América y Oprah me tendrá en una linda jaulita donde me dará granos de café extraños que han sido purificados por el tracto intestinal de un pájaro dodo". Sí, excepto que esos "éxitos de la noche a la mañana" rara vez salen de la nada. Es del mismo modo en que un asteroide no "aparece de repente" y destruye a la tierra, enviándola a un apocalipsis lleno de humo y polvo: ese cabrón tardó mucho tiempo en llegar a la tierra, incluso mientras no nos fijábamos. Ese éxito de la noche a la mañana no fue una lotería. Probablemente rondó en la oscuridad por años. La lección es: el trabajo importa.

17-. DEJA QUE EL UNIVERSO OPERE

Mi teoría para la vida y la escritura es esta --y es una vaina bien profunda, así que bájale a las luces, ponte tu suéter cuello de tortuga serio, con el saco de los parches en los codos, fúmate este hierba que le robé al líder de un culto afgano. La teoría es esta: deja que el universo opere y el universo operará en ti. Mejor explicado: hay componentes en todas las carreras (pero en la escritura particularmente) que están más allá de tu alcance. No puedes controlarlo todo. Hay cosas que sólo las puedes dejar al destino. Pero, tienes que poner el esfuerzo. No te va a pegar un rayo si no sales corriendo bajo la tormenta. Maximiza tus posibilidades. Esto lo logras, dejando que el universo opere. Y eso lo logras, trabajando.

18-. LA AUTOPUBLICACIÓN NO ES LA SALIDA FÁCIL

Autopublicar es una senda viable. No es, no obstante, la vía fácil. Olvídate de esa noción. Uno no hace una vueltica de bailarina y un libro te sale de la vagina (y si eso te pasa, por favor, ve a un doctor. En especial si eres un tipo). Toma mucho esfuerzo el dar vida a un libro autopublicado. Sácate de la cabeza la idea de que es más barato y más fácil. Más rápido, sí. Pero hasta ahí.

19-. NO, TOTAL EXTRAÑO, NO QUIERO LEER TU VAINA

De verdad que no. Y tampoco lo quiere ningún otro autor activo. No es nada personal. Es sólo que no te podemos diferenciar de cualquier otro spam-bot rondando la internet a la espera de echarnos un balde de pastillas para el pipí y peticiones de dinero para nigerianos. Eso no quiere decir que no seremos amistosos o incapaces de discutir tu trabajo, pero lo más probable es que ya estemos agobiados con nuestra propia cadencia de palabras (o ebrios y confundidos en un restaurán de pollo por ahí). No podemos tomarnos el tiempo para leer el trabajo de un total extraño. Sé educado si lo vas a pedir. Y no encabrones cuando te digan que no.

20-. TUS CELOS Y DEPRESIÓN NO IMPORTAN

Todos los escritores se atacan a sí mismos. Está en nuestros genes. Vemos a otros autores teniendo éxito y al principio estamos tipo "¡Yay, qué bueno por Fulanito!", pero diez minutos después nos pega el francotirador de la envidia y este sentimiento venenoso te atraviesa el cerebro como una estaca de acero: ¿PERO POR QUÉ YO NO? Es ahí cuando decidimos darnos un baño con la tostadora en las manos. Fuck that. Esos sentimientos no importan. No te ayudan. Pueden ser normales, pueden ser naturales, pero no son útiles y ciertamente no son interesantes.

21-. HABLAR DE ESCRIBIR NO ES LO MISMO QUE ESCRIBIR

No hacen falta más comentarios.

22-. LLENA TU CELDA CON C4 Y MÁNDALA A VOLAR

Los escritores aspirantes se encierran en celdas de zoológico con otros aspirantes, donde una de dos cosas terminan ocurriendo: uno, todo el mundo se masturba contentos unos a otros y nadie escribe nada malo a todo el mundo le gusta todo y es un enorme festival de cosquillitas en las pelotas para felicitarnos; dos, el lugar está cargado de gente que no sabe cómo dar críticas constructivas y hay una nube de malas vibras flotando sobre tu cabeza como una plaga de murciélagos orinando. Si te consigues en una de estas celdas de zoológico, vuela un hueco en la pared y escapa a la libertad.

23-. APRENDE A RECIBIR LOS GOLPES

Los agentes, editores, críticos, lectores, trolls de internet, te van a decir cosas que no quieres oir. Una piel de escudo no es suficiente. Necesitas un carapacho tachonado. Un filoso exoesqueleto. Escribir es una carrera de golpes en la que invitas a las hondas y a los arcos a dispararte en la cara y en el corazón. Es lo que es.

24-. PUEDES HACER LO QUE TE SALGA DEL FORRO

Como escritor, el mundo que creas es tuyo y sólo tuyo. Alguien siempre estará ahí para decirte que no puedes hacer eso, pero esa gente casi siempre está equivocada. Eres un escritor. Puedes hacer lo que te provoque. Puede no ser lucrativo. Puede que no te pague el alquiler. Pero no estamos hablando de eso. Estamos hablando de lo que pasa entre la página en blanco ante ti y tú. Son la historia y tú. Si lo amas y quieres escribirlo, entonces cierra el hocico y escribe. Y hazlo bien. No esperes más allá de esto (no esperes recompensa, no esperes desfile de victoria), sólo abraza la satisfacción que da hacer lo tuyo.

25-. LA ÚNICA REGLA QUE NO SE PUEDE EVADIR

Escribe. Escribe, escribe, escribe, coño e' madre, escribe. Escribe mejor hoy de lo que lo hiciste ayer y mejor mañana de lo que lo haces hoy. Adelante, mecanógrafo vulgar, adelante. Si no eres un escritor, algo te detendrá --tus propias dudas, el odio de los que te odian, pobre manipulación del tiempo libre, un mapache hambriento que se enamoró de tus dedos, whatever. Si eres escritor, escribirás. Y nunca te pararás a mirar atrás.

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