He vuelto a jugar Diablo 3 recientemente, después de un período alejado del juego. Aunque la historia sigue siendo la misma (y dudo que la puedan corregir), muchos defectos de gameplay han sido corregidos. Me encontré con que el juego es ahora mucho mejor que cuando lo compré.
Así que he vuelto a jugar y no sólo a jugar, sino a jugar Hardcore. En caso de que haga falta aclararlo, Hardcore es la modalidad en la que tienes una sola vida. ¿Te mataron? A llorar pal' valle, estás muerto. Originalmente, lo intenté por no dejar, más para ver cómo me iba que otra cosa, y lo he encontrado en particular adictivo. Como dicen por ahí, "Una vez juegas hardcore, ya no te provoca jugarlo normal".
De hecho, uno de mis personajes hardcore, Wolfram, es un Bárbaro. Esa clase siempre me ha parecido una ladilla, la menos interesante de las opciones. Y pensando en un personaje alternativo (por razones que estoy pronto a explicar), se me ocurrió un Bárbaro, que es algo que no me llama la atención... a menos que sea jarcorr.
A esa porra la llamo, con afecto, "El Amanzaguapo". Si pudiera pegarle una cinta en espiral y ponerle un pom-pom en un extremo, lo haría, sería el perfecto palo e' piñata. Blandiendo esto, me siento como otro bastardo con un bate maligno.
"¿Pero cuál es el objeto de jugar así?" puedes preguntar. "Inviertes horas y esfuerzo en desarrollar un personaje, y de repente te matan y lo has perdido todo. ¿Para qué?"
Bueno:
1-. Esta es quizá la misma razón de por qué me gustan las películas de terror, las montañas rusas, la idea de lanzarme en paracaidas y el vandalismo: la adrenalina es deliciosa. Cuando estás jugando normal, entras en una zona peligrosa, estás pendiente y ya. En hardcore, los sentidos se te disparan, estás atento y siempre con una alfombrita de pavor, sabiendo que si te equivocas, no vas a poder corregir el error. Como le dije a mi primo Ken (habitual compañero Hardcore) después de una lucha tensa, "ese sustico estuvo sabroso".
Sólo mira el rostro de este infeliz.
Considera esto: vas paseando por la mazmorra X, repartiendo tundas como el martillo de Dios. Hasta te da chance de hacer chistecitos. Giras una esquina y DE REPENTE SALE UN MONSTRUO ÚNICO QUE LANZA PAREDES Y DEJA UN RASTRO DE LAVA POR DONDE PASA. Y ha colocado un muro detrás de ti, para evitar que huyas. ¿Ese punto, en el que todo en tu mente se borra y el único objetivo se vuelve sobrevivir, mientras ves tu vida bajar? Cuando escapas, se siente bieeeeeeen. Por supuesto, es bastante intenso, así que si después de esa near-death experience, necesitas un momento para respirar, tómatelo tranquilo.
2-. Diablo es, escencialmente, un juego que puedes terminar todas las veces que quieras. Siempre hay algo más que descubrir, un arma que te hará más poderoso, alguna habilidad que no tienes. Pero cuando terminas el juego en su última dificultad, Nivel 60, Hardcore, wow. Prácticamente lo terminaste. ¿Que otro testamento hace falta para demostrar tu habilidad y maestría? Pasaste el fucking juego en todas las dificultades, llegando al nivel máximo, sin morir. No importa los logros de los jugadores normales, a duras penas se podrán comparar con este.
3-. Cuando juegas con gente por internet, es normalito, cada quien se puede ir por su lado y si alguien muere, gran vaina, resucitas ahí mismo. En hardcore, se forman fuertes lazos entre los miembros de un equipo (de hecho, es habitual que un equipo juegue siempre con los mismos jugadores). Esto le da un nuevo significado a la expresión "juego cooperativo". La gente se esmera en ayudarse y ser realmente amistoso. De hecho, hay quienes opinan que tener amigos en Hardcore es primordial.
Joan & Rose: Inquisitors for hire!
4-. Se acabó la historia del Auction House. No sé si recuerdas, pero el AH es una casa de subastas donde la gente entra y vende sus ítems. Bien ¿Cuánta gente llega a nivel 60? Cuando un jugador consigue un ítem bestial y alcanza nivel 60, las probabilidades son de que se quede con el ítem o se lo pase a otro personaje suyo (ya que todos tus personajes HC comparten el stash), no de que lo ofrezca en venta. Claro que sí lo ves, pero no juega un papel como el que juega la AH de juego habitual.
5-. Por lo detallado en el punto anterior, te toca desarrollar bien a tus artesanos. ¿El Herrero y Covetous Shen, el joyero? Se van a volver muy buenos amigos tuyos en este viaje.
6-. El sentimiento de satisfacción que da cuando terminas una sesión, sales del juego y dices "Sobreviví otra jornada", hace la sonrisa en tu rostro bastante válida.
Ahora, bien. Jugar Hardcore es una cosa de preferencias. Si no tienes paciencia, o te da cosita, o sabes que te vas a morir de la rabia cuando tu personaje ya no exista, entonces esto no es para ti. Y si te animas, más vale que tengas en cuenta los siguientes consejos:
A) Acepta que vas a morir.
El legendario soldado Ronald Speirs dijo una vez "El truco para soportar esta guerra es entender que todos vamos a morir. Entre más rápido lo aceptes, menos te molestará". Nadie vive para siempre, viejito. Estás aquí por ahora y eso vale la pena disfrutarlo. De hecho, las probabilidades juegan en tu contra. Claro, esto añade a la emoción de todo. Es un círculo.
B) Acostumbrate a escapar.
Nunca te arrincones. Deja siempre una vía para que puedas retroceder. Sé que el primer instinto de cuando ves a un monstruo es atacarlo, pero no sabes quién acompaña a ese monstruo. Por ello, tómate siempre un momento para tener una vía de escape. Y siempre ten una habilidad de emergencia para huir (la "holy shit" skill). La Cortina de Humo del Demon Hunter, el Salto del Bárbaro y la Piel de Diamante son elementales poderes para seguir con vida.
C) Echa pa' atrás.
Periódicamente, repite las búsquedas. Ganar niveles extra repitiendo misiones ya cumplidas, te permitirá mejor preparación cuando te enfrentes con verdaderos riesgos a tu salud. Cuando menos, estarás ganando más vida con cada nivel. Eso ya es suficiente razón.
D) La Vitalidad lo es todo.
No importa qué ítem recojas, siempre procura tener elementos que te suban la vida. Como la misión última de Hardcore es sobrevivir, todas las demás metas están subordinadas a esta. Esto no se trata tanto de hacer daño, sino de saber recibir daño. Es sencillo: entre más vida tengas, menos probabilidades de morir.
E) Pasa el juego normal.
Esto es elemental. Es importante que te hayas familiarizado con los retos del juego, para que después no te tomen por sorpresa. ¿Recuerdas ese teniente de Diablo que se teletransporta hacia ti y te da un madrazo que baja burda la vida? Imagínate si la primera vez que luchas contra él, tienes una sola oportunidad.
F) Nunca juegues hardcore con extraños.
Esta recomendación la leí por ahí. Dice que cada quien tiene métodos de juego distintos y que algún imbécil que ponga en riesgo a todos (todos hemos jugado con uno, vamos) simplemente no vale la pena. Lo que es más, nunca te vas a librar de la ladilla que te van a montar cuando en vez de ayudar a un extraño en un momento feo, te fuiste corriendo y lo dejaste morir.
G) Si juegas solo, juega con un NPC.
Elemental, no sólo porque distraen al enemigo y evitan que te peguen a ti, sino porque cuando ven a un grupo de monstruos campeones o único, lo anuncian (El Templario: "Do you see that enemy over there?"). Así, estás atento de que viene La Casita del Terror mucho antes de que la veas.
H) Ojo con la conexión.
No hay nada peor que estar repartiendo tundas, para que de repente el juego no registre tus acciones y, cuando vuelvas a la acción, te han bajado la vida muchísimo. Este es un defecto que Blizzard necesita corregir cuanto antes, pero hasta que lo hagan, mi recomendación: ¿Tienes el efecto de la "liga elástica"? Esto ocurre cuando avanzas un par de pasos y el juego da un salto para ponerte en tu locación original. En ese caso, quédate donde estás y/o retrocede hasta una zona segura. Quédate ahí hasta que pase la turbulencia, échale un ojo a tu barra de conexión. A menos que esté verde, no vayas a la guerra. Alguien en los foros llamó a los problemas de conexión "La Mano del Destino": yo lo veo como si me voy a pelear y una herida se te infecta y mueres. En batallas reales, hay cosas que escapan de tus manos.
Entonces asegúrate de llevar burde' antibióticos.
I) SUMA PRECAUCIÓN CON LOS MANIACS.
Sí, estos malditos:
Un golpe, te puede matar. La mejor opción, es atacarlos a distancia, así que siempre desarrolla a tu personaje con la capacidad de resistir mucho daño, por un lado, y por otro la opción de atacar a distancia. Aquí es donde tu habilidad de escape vendrá en uso.
J) Guarda tus items.
Imaginemos que avanzo con Wolfram bastante, El Amanzaguapos ya no me es útil, lo vendo y me matan. Perdí el bate de Bob Abreu. En vez de eso, sería harto mejor guardar el arma y que le sea útil a otro personaje que yo me cree, si las cosas resultan mal.
K) Ten más de un personaje HC.
Por dos motivos. El primero, te dolerá menos cuando tu personaje muera. El segundo, podrás darle buen empleo a los ítems que vayas recogiendo.
Rose, la wizard de mi primo; nótese (si se puede) el aro rojo en la base del personaje, mark of the Hardcore.
Eso es todo. Hay otras recomendaciones qué hacer, pero como este post ya está bastante largo, lo dejaré para otra ocasión (además que es un tema bien específico: los únicos con los que debes ser extremamente cuidadoso).
Anímate, juega Hardcore. Y repite las palabras de los gladiadores antes de luchar: ¡Salve, César! ¡Los que van a morir te saludamos!
¿Por qué tan nerd? Fuck you, that's why.
No hay comentarios:
Publicar un comentario