miércoles, 28 de diciembre de 2022

Feliz Navidad, Muchachos: Silent Night, Deadly Night


Estaba viendo el otro día al poster de esta película de terror navideña sobre el Grinch que iba a salir, o quizá ya salió, y eso me recordó que hay dos películas nuevas sobre un Santa diabólico, una de ellas con el tipo de Stranger Things, que se suman a otras películas navideñas de asesinatos que hemos tenido estos últimos años, y que viene una película de terror sobre Winnie the Pooh que si bien no es navideña, tiene su tumbao’ y se puede poner en las fiestas así como El Día de la Marmota tampoco es navideña pero hay nieve y magia y sale Bill Murray.

 

Y viendo la sufridera de la gente en twitter, el pozo de toxicidad más grande que tiene la humanidad actualmente, me acordé de la película escandalizante de navidad por excelencia, una cinta de la que todo el mundo habla llevándose las manos a la cabeza, pero que parece que sólo los goblins del terror hemos visto. Cuando esta película estrenó, hubo grupos de protestas afuera de los cines, la productora tuvo que retirarla de exhibición. En el Reino Unido no fue autorizada y sólo salió en formato casero y sin censura en el año 2009, casi 30 años después de que salió al cine. Roger Ebert y Gene Siskel hicieron un dramón en su programa tras ver esta película, que ya todos sabemos que no eran partidarios del cine slasher, pero en este caso se afincaron, acusando a los cineastas de ser unos mercenarios inmorales con las manos manchadas de sangre (“you’re making blood money”) y Gene llegó a leer una lista con los nombres del equipo de producción, para decirles “Debería darles vergüenza”.

 

La película de la que hablo es Silent Night, Deadly Night.

 

Recuerdo que un pana del liceo, Omid, me hablaba de esta película cuando éramos chamos porque cuando tienes 13 años quieres ser atrevido y darks y especial, y Omid me decía que, mientras yo estaba obsesionado con Night of the Living Dead y The Texas Chain Saw Massacre, nada iba a superar nunca a Holocausto Caníbal y Noche de Paz, Noche de Muerte.

 

Y ese es el tono con el que se habla de esta película. Una cosa prohibida que raya en leyenda urbana.

 

Silent Night, Deadly Night es una slasher bastante normalita. A diferencia de otras películas como Halloween, The Burning o A Nightmare on Elm Street, que echan el cuento desde el punto de vista de jóvenes y potenciales víctimas, acá seguimos al traumatizado Billy, que perdió a sus padres a manos de un malandro vestido de Santa Claus, paró en un orfanato repleto de monjas sádicas (because there ain’t not hate like Christian love), y ahora lo explota su jefe, no tiene novia y tiene que calarse el invierno en las mismas condiciones que tú o yo. Sólo que mientras nosotros pensamos en agarrar un hacha y liberar tensión, Billy de verdad lo hace.

 

Es un hilo narrativo bastante frágil. La película se echa media hora en mostrar el cuento de Billy desde que era chiquito, me imagino que para despertarnos lástima, pero el libreto no tiene la fortaleza para movernos la fibra interna. No quiero compararlo con otras películas que sí lo logran (Psycho 2, Repulsion, la antedicha Texas Chain Saw) porque es como esos idiotas que lanzan libros de fantasía a la basura porque “es que es inferior a El Señor de los Anillos”. Acá, sin embargo, faltó un personaje de ancla sólido que no fuera Billy y con el que nos pudiéramos identificar así como uno se identifica con Nancy Thompson o con Laurie Strode.

 

Ya hemos visto películas narradas desde el punto de vista del asesino, siendo Maniac (2013) indudablemente la mejor, pero acá Billy no es un personaje tridimensional ni corre con la suerte de estar interpretado por Frodo; SD, DN salió en 1984, el mismo año en que salió Friday the 13th part IV, la película que marcó el final del ciclo slasher clásico. Para ese momento, ya los clichés eran reconocidos y había una legión de películas sobre asesinos en trajes especiales con equipos de producción amateurs y bajo presupuesto. Las cosas proceden by the numbers: Billy va por aquí y por allá cazando gente de formas creativas, hay una dosis de tetitas para  subir el nivel de explotación, y eventualmente llegamos al tercer acto donde se confronta al asesino.

 

La gran diferencia es que acá el asesino va disfrazado de Santa, la película salió en navidad y tuvo una promoción fuerte que recuperó la inversión, con creces, del bajo presupuesto. SN, DN no es ni de vaina la primera película con un Santa diabólico y si ves la Black Christmas original, esa es una película mucho más oscura y realmente terrorífica que esta. Pero ninguna de esas tenía a un comercial corriendo a toda hora por la tele, para que las doñas y los ajenos al terror se escandalizaran. La gran queja era que “tú, como productor, eres un inmoral por mostrar a Papá Noel de esa manera ante niños, que no saben diferenciar a un Santa bueno del malo y tú les estás dañando sus inocentes mentes. Would somebody please think of the childreeeen???”

 

Which is fucking hogwash, porque los niños no son tan tontos y los chamos, sobre todo en esa época, nos deleitábamos con contenido violento. Había una comiquita de Rambo, una comiquita de Robocop, había juguetes de Freddy Krueger y Depredador: Fue la época dorada de películas hechas para adultos pero mercadeadas a niños, y era la gloria. Este es el tráiler que salió en la televisión y arruinó todo:

 


 Y cualquiera que vea Silent Night, Deadly Night concluirá que es más bulla que la cabuya, una exageración de parte de los despistados de siempre.

 

¿Recomiendo, entonces, Noche de Paz, Noche de Muerte? Hell yeah. Está buena para pasar el rato y ahorita la versión que está circulando es restaurada por Arrow Video, con las escenas eliminadas integradas a la cinta. Puro gore, pura sangre y pura bazofia de esa que nos encanta, esto es como Boyhood pero más corta, hecha en menos tiempo, por muchísimo menos dinero, y mucho, mucho más entretenida.